Estos son los bocadillos más sabrosos para compartir con amigos… ¡algo que podemos volver a hacer pronto! Están llenos de sabores picantes y texturas geniales.
Podrías usar cualquier papa, pero creo que la forma y la textura de los kipflers funcionan muy bien. ¡Tampoco tienes que pelarlos! Agregar el queso al final agrega otro nivel de delicia y textura.

Son una especie de pieles de patata cargadas, pero luego cruzadas con chips de corte grueso. Sólo un muy buen momento.

ingredientes
1 kg de patatas Kipfler
Aceite de oliva virgen extra para cocinar
1,5 cucharadita de sal
1/2 cucharadita de chile en polvo
1,5 cucharaditas de tomillo
1 cucharadita de ajo en polvo
1 taza de queso rallado mixto (usé parmesano y cheddar)
2 cucharadas de perejil de hoja plana finamente picado
2 cucharadas de cebolla tierna finamente picada
1,5 cucharadas de pepinillos finamente picados
Salsa
1/2 taza de yogur
1 cucharada de salsa picante favorita (use menos para calentar menos)
1 cucharadita de miel
1 cucharadita de vinagre de vino blanco
Direcciones
Precalentar el horno a 190c.
Corta cada patata en rodajas de 1 cm de grosor. Colocar en una cacerola y cubrir con agua, sal y llevar a ebullición. Cocinar por 5 minutos, escurrir y reservar.
Rocíe una fuente para hornear con aceite, coloque las papas en una sola capa y rocíe con más aceite.
Mezcle la sal, el chile, el tomillo y el ajo en polvo. Espolvorea las papas de manera uniforme. Asar en el horno precalentado durante 15 minutos o hasta que estén doradas, voltear y tostar por ambos lados.
Mientras asa, haga su salsa: combine el yogur, la salsa de chile, la miel y el vinagre y mezcle hasta que quede suave.
Espolvorea con queso como 1 cucharada de perejil picado y regresa al horno hasta que se derrita y se dore.
Antes de servir, vierta la salsa por encima y esparza sobre el resto de las hierbas y los pepinillos. Espolvorear con sal y pimienta. Cavar en.
S.S. X